“Corrí sin tomar riesgos”
Crew facts
- Fernando Domínguez asegura que estuvo cerca de quedarse en silla de ruedas, pero que su amor por las motos le dio fuerzas para volver a andar. Ocurrió cuando tenía 16 años. Hacía poco que se había comprado una moto y le arrollaron por detrás en una autovía. El destino quiso que por allí pasara un técnico de emergencias que le salvó.
- Natural de Cuenca y mecánico de profesión, Fernando es responsable de flota de vehículos de prensa de Toyota España. Tiene 50 coches de prensa a su cargo que salen en medios y series de televisión. En 2006, Toyota llevó a seis Land Cruiser con periodistas al Dakar y allí conoció a Isidre Esteve, que más tarde, tras su accidente, le vendió una de sus motos. Ganó la primera carrera que disputó con esa máquina.
- Creía que si alcanzaba los 30 años si haber corrido el Dakar en moto, ya no lo haría. Se equivocaba. Con 43 años, Fernando Domínguez debutó en el Dakar en 2021 y cumplió su meta: acabar. Asegura que tras divorciarse, se volvió a enamorar, pero esta vez de las dunas. Se dio cuenta que se le daban bien y un amigo le ayudó a pagar la inscripción para su primer Dakar.
- En su debut en el Dakar dio una lección de resistencia. Al inicio se lesionó la rodilla y pese al dolor, aguantó y terminó. En Cuenca le reconocieron la gesta y sus instituciones insistieron para que regresara. Volvió en 2023 tras superar esa lesión y quería repetir en 2024, pero un accidente le obligó a posponer su meta: se fracturó la clavícula y 6 costillas. La recuperación fue dura pero quería regresar al Dakar 2025 para enfrentarse a un reto mayor: completar el Dakar en Original by Motul. No obstante, cuando ya lo tenía todo preparado, en octubre de 2024 sufrió una caída en su última carrera del año antes del Dakar y se lesionó la rodilla. La mala suerte volvía a apartarle del Dakar por segundo año consecutivo, esta vez, por una rotura de meniscos y ligamento colateral. Tras un año de recuperación, Fernando regresa a la carrera en Original by Motul.
Ambition
F.D.F.: “Pensé que solo haría un Dakar, pero fue tal el seguimiento que hubo en Cuenca y el apoyo que seguía teniendo tras mi primera participación, que tenía que volver y pude hacerlo en 2023. El Dakar es un evento en el que la gente se identifica mucho contigo y en Cuenca hay mucha afición por las motos. Es un orgullo representar a Cuenca en el Dakar en motos y ahora más aún en la categoría más pura y dura como la de Original by Motul”.
“En 2024 no pude volver al Dakar al sufrir una caída muy tonta, a solo 40 km/h. Estuve a punto de dejarlo todo porque tuve que enfrentarme a un año de recuperación de una lesión muy dura. Me tuvieron que reconstruir la clavícula con 18 tornillos y un hierro y a finales de mayo de 2024 me quitaron el hierro. Desde entonces, estuve en rehabilitación, trabajando para poder correr el Dakar 2025 en Original by Motul, pero a pocos meses del inicio de esa edición, me volví a lesionar. Me caí y me lesioné las dos rodillas. Me volvía a perder el Dakar. Tenía que hacer un año de recuperación, sin hacer locuras, aunque competí en el Campeonato de España de Rally Raid sin haber podido entrenar. Corrí sin tomar riesgos. Y finalmente, en octubre de 2025 pude ir a entrenar a Marruecos para comprobar mis sensaciones con las rodillas. El test fue positivo, pude pilotar muchas horas durante varios días y fue genial. No llego en el estado de forma de mi primer año, pero sí que puedo llegar mejor preparado que en mi segundo Dakar”.
