“Tenemos todo listo para dar guerra en el desierto”

Albert Llovera es uno de esos deportistas únicos a nivel internacional. Con tan solo 17 años fue el participante más joven de los Juegos Olímpicos de Invierno de Sarajevo en 1984, donde compitió en la modalidad de esquí. Un año después, mientras participaba en la Copa de Europa de esquí, sufrió un duro accidente donde se rompió varias vértebras dorsales con afectación de la médula y se quedó parapléjico. No obstante, lejos de darse por vencido, Llovera tiró de coraje y superación desde su silla de ruedas para proclamarse subcampeón del mundo de baloncesto con el equipo Charlosteville Cardinals de Virginia (Canadá) en 1989. Ese mismo año ya comenzó a hacer sus primeras incursiones en la Copa Peugeot de rallies de Andorra. En 2001 se convirtió en la primera persona con movilidad reducida en disputar el Campeonato del Mundo de Rallies. Y en 2007 debutó en el Rally Dakar como piloto oficial Isuzu. Desde entonces, ha participado en otras seis ediciones más, consiguiendo un 15º puesto en 2020 en Camiones como mejor resultado. Fuente de inspiración y médico ortopedista en su ciudad natal, Andorra La Vella, Llovera ha escrito un libro (No limits) y da conferencias por medio mundo durante el año. A su octava participación dakariana llega con un nuevo proyecto respaldado por Ford España con un Cargo 4x4 con adaptaciones en el volante de Guidosimple. En la cabina estará nada menos que su sobrina, Margot, que debutó en el Dakar como copiloto en 2022 en la categoría T4. Para los dos es una ilusión muy especial y con ellos compartirá aventura el experto mecánico checo Petr Vojkovsky. El objetivo será aprender de los problemas de la pasada edición, donde Llovera sufrió un aparatoso vuelco en la primera etapa y se vio obligado a abandonar tras un problema de suspensión. Llovera quiere sentar las bases de su proyecto con Ford y para ello buscará ir de menos a más en la 46ª edición del rally más duro el mundo. El andorrano no conoce la palabra límite y volverá a suscitar los aplausos de todo el vivac.

A.L.: “Afronto mi novena participación en el Rally Dakar con muchísimas ganas. Estoy súper contento por poder trabajar con Ford España en este proyecto, ya que compartimos los mismos valores y actitud ante la vida. El año pasado me quedó una espina clavada y ya llevo dos ediciones que han sido muy cortas. Por lo tanto, lo primero que tenemos que conseguir es completar la carrera y, de lograrlo, me gustaría hacer un top 15. Durante todo el año hemos hecho un gran trabajo con Guidosimplex para mejorar mis mandos adaptados y que funcionen aún más suaves. Además, el Dr. Mir me volvió a operar del dedo pulgar de la mano izquierda. También estoy súper agradecido al equipo FesFesh por todo el trabajo que hacen con el camión. Por segundo año tendré a mi sobrina Margot a mi lado, que me hace mucha ilusión porque es una luchadora, está súper preparada y se lo merece como nadie. También vuelve Marc como mecánico y esto nos facilita mucho todo, ya que, además de su experiencia y de que nos parecemos mucho en cuanto al carácter, compartimos el mismo idioma y sabe leer muy bien las etapas. Lo tenemos todo listo para dar guerra en el desierto”.

M.L.: “Llego con más ganas que nunca a este Dakar, después de lo que nos ocurrió el año pasado. Hemos podido entrenar mucho con el camión y la puesta a punto de Albert ha sido fantástica. Lo que más me impactó de competir en 2023 por primera vez al lado de mi tío es que nunca lo había visto tan feliz y tranquilo; me sorprendió muchísimo. Y es que lo veo sufrir durante el año para conseguir los apoyos importantes, para sacar adelante su trabajo, y verle sin presión y disfrutando es una verdadera pasada. Fue duro abandonar tan pronto y por primera vez vi lo que significa la mala suerte en los rallies. Dolió mucho y este año hay que terminar como sea. Queremos quitarnos esa espina clavada y lo importante es que seamos capaces de llegar a meta. Si lo hacemos, el resultado llegará solo”.

M. T.: “Para mí es un reto volver al Dakar. El año pasado me supo muy mal no poder asistir por problemas personales de última hora. Me hizo mucha ilusión que Albert me brindase esta oportunidad otra vez en primavera. Tengo muchas ganas de volver a la cabina con él porque es la persona con la que mejor me he encontrado en todos los Dakar que he hecho. Es un luchador y se merece que yo esté 100% a su lado para ayudarlo a tener una buena posición en la general y que las cosas salgan bien. Hemos estado probando el camión en Marruecos y hemos comprobado que va muy bien. Quedé sorprendido del buen equipo que formamos también con Margot y llegamos con muchísimas ganas”.