El tiempo no le atañe

Dakar 2024 | Etapa 12 | YANBU > YANBU
18 enero 2024 - 23:42 [GMT + 3]

 Hay un puñado de competidores saudíes y de todos ellos Yazeed Al Rajhi es el más conocido. Abdulhalim Almogheera es el único motorista nacional que participa en esta edición del Dakar. No es el primero. Michal Al Ghuneim lo hizo antes que él en 2020 y 2021. Pero a Abdulhalim le gusta más el segundo plano. Desde el Start Camp, avanza a un ritmo pausado, con la flema característica de un camello. Los demás persiguen el reloj, Abdu tiene tiempo.

 En Original by Motul, los miembros de la organización que se ocupan de los motoristas sin asistencia le conocen bien: "Acaba de llegar, suele ser de los últimos. Pero no se te va a escapar: café, té... después se ocupará de su moto. Ya estamos acostumbrados. Sabemos que será de los últimos en cerrar el baúl, así que siempre lo incluimos en la carga del segundo camión que sale." Y le conocen bien, al parecer. Abdu se quita el casco, con la cara llena de arañazos. Sobre el sillín, un cojín de sofá, para preservar las nalgas en el trayecto. Alguien pasa, le da la mano y le felicita en árabe, así que él sonríe ampliamente e intercambia algunas palabras. Cuando se alejan, le reconoce. Sentado en la silla plegable de camping proporcionada por Motul, con las piernas cruzadas como en la terraza de un café, Abdulhalim enciende un cigarrillo. Si bien el leitmotiv de todos los motoristas que participan en Original by Motul es racionalizar las tareas para ahorrar tiempo, a él parece que el tiempo le sobra. Durante el día de descanso, incluso se dio un capricho y se fue a comer a la ciudad y visitó un hammam, aplazando el mantenimiento de la moto hasta la noche. Es justo lo contrario del método preconizado por los habituales de la categoría. Pero su método parece funcionar. Al fin y al cabo, está a pocos kilómetros de la meta, su moto está en buenas condiciones y, después de haber terminado de fumar, ya parece más fresco. "Las etapas difíciles fueron la primera etapa, la contrarreloj de 48h y la de hoy. He descubierto muchos terrenos que no conocía. Me encantan las dunas, pero aparte de la región de El Qassim y Al Hofuf no conocía nada. Estoy cansado, pero después de una ducha y un masaje, estaré bien. Me cuido y cuido la moto, me lo tomo todo con calma hasta llegar a la meta.”

Mañana estará en la línea de meta. Nadie lo duda. Sin embargo, al principio, pocos habrían apostado por el método Abdulhalim. Este fin de semana, volverá a casa con su mujer y sus tres hijos en Al Hofuf. Y como todos los lunes, se pondrá al volante del camión que maneja por las mañanas como conductor para la administración. Por la tarde, irá a su garaje para reunirse con sus dos mecánicos, su segundo trabajo. En las redes, seguirá alternando con Mason Klein. "Mason vino a vernos y congeniamos. Le ayudé a llevar su moto al vivac cuando se estropeó durante el enlace, y luego vino casi todos los días para ayudarme y ver cómo estaba. Me invitó a ir en moto a Estados Unidos para enseñarme navegación." Mason tendrá mucho trabajo con Abdu. La técnica del saudí consiste en concentrarse únicamente en las casillas del libro de ruta donde aparecen way points. A excepción del prólogo, no se ha saltado ni uno solo, dando marcha atrás si era necesario y siguiendo las pistas hasta la siguiente casilla marcada con el símbolo WP rodeado con un círculo. Una forma original de navegar, pero que, al igual que su gestión del tiempo en el vivac, funciona. Abdu sigue al pie de la placa amarilla con su número 122, la correspondiente a los que mañana podrán subir al podio reservado a los "finishers", punto final de la aventura. Ese era su objetivo. "Hoy he aumentado mi ritmo para subir en la clasificación, porque hasta entonces he ido asegurando. En el puesto 19 de los 21 pilotos que siguen en la Original by Motul, 87 en la general, a más de cincuenta horas de Ricky Brabec, Abdulhalim va camino de lograr su objetivo. Y en Arabia Saudí, todo el mundo le conoce ya: ¡las televisiones locales se han fijado en Abdulhalim Almogheera desde que Yazeed Al Rajhi dejó de correr!